Pantalones: Slim Fit vs. Skinny

Slim Fit y Skinny, la diferencia que debes tener clara a la hora comprarte unos pantalones 

J.Crew

Afortunadamente, se han acabado imponiendo entre las marcas de moda masculina patrones y tallajes más ajustados para sus prendas, especialmente en el apartado de pantalones sport y vaqueros. De este modo, se han reducido al mínimo los arreglos y estrechamientos que se derivan del ready to wear. De hecho, es cada vez más frecuente que se ofrezca un mismo pantalón en distintas versiones.

Por ello, a la hora de comprarnos unos pantalones debemos tener claros dos conceptos: Slim Fit y Skinny. Los dos términos anglosajones hacen referencia a delgado o ajustado, pero el segundo, que se podría traducir como pegado a la piel, en un grado aún mayor. Y no es una diferenciación irrelevante o menor, ya que determina que la prenda quede todavía más ceñida a tu cuerpo.

Si bien es cierto que depende del patronaje de cada firma, por regla general, el modelo Slim Fit es el más adecuado para hombre y no el Skinny, que resulta excesivamente ajustado. Al fin y al cabo, estamos ante unos pantalones y no ante unas mallas. Un matiz que puede hacernos pasar de ir bien vestidos a incluso rozar la ridiculez. Aunque hay que ser conscientes que no le sienta bien a todo el mundo, todo dependerá de la fisonomía de cada uno.

The Sartorialist

Y estoy haciendo referencia a pantalones sport, como son chinos y jeans, porque los pantalones de vestir no te debes permitir llevarlos excesivamente estrechos, siendo en este caso el ancho de boca adecuado de 19 a 22 cm, pero no menos.

Un buen ejemplo que se puede traer a colación es la marca norteamericana J.Crew que fabrica sus pantalones en diferentes fits, siendo el modelo 484 en mi opinión de los RTW más acertados.


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